Esta nueva cepa llamada Delta, del coronavirus SARS Cov 2, ha creado un nuevo escenario en el mundo, México no se ha quedado al margen de ello. Ha tenido un desarrollo increíble, en pocas semanas ha multiplicado los enfermos, contagiados y la saturación de hospitales.
Este nuevo escenario nos da pie a saber a lo que nos enfrentaremos en las aulas. No es sencillo, pareciera que volver a jugar, a convivir estará normalizado. No lo creo así. Según estudios las condiciones, síntomas y efectos del coronavirus en los adolescentes es diferente a como se presentan en los adultos y jóvenes, quienes son ahora los que padecen la cepa llamada Delta.
Nuestro encuentro será muy especial con los adolescentes, debido a que tendremos que lidiar con un trato diferente, con un enfoque de atención a su salud emocional. Otro, el aspecto de recuperación y diagnostico de conocimientos previos. Considerar la logística de trabajo, porque el trabajo a distancia seguirá, pero ahora se suma el trabajo en la escuela. O sea esto es una duplicidad y por triplicado de las actividades con los grupos con los que se cuente.
Solo como ejemplo, el ciclo pasado atendí a 20 grupos, de 40 alumnos promedio. En esa atención las reglas fueron claras, puntualidad en la entrega de trabajos, respeto de horarios de atención (que no siempre se cumplen, con llamadas fuera de tiempo). Mi jornada de trabajo iniciaba a las 8 de la mañana y de forma intermitente terminaba a las 8 de la noche y a veces hasta después de esta hora.
Sumando a la labor docente, la labor administrativa de cursos, cuestionarios, webinars, reuniones virtuales con padres de familia, directivos, colectivo, etc. Este trabajo del ciclo escolar fue agotador, desgastante, no hubo vida privada. Atención a la familia como se debiera.
El proceso de este nuevo ciclo debe ser muy bien estratificado, porque la distribución de horas y actividades no es justo y parejo. Si con 4 grupos o 6 se cubren mis horas semana, creo que debo apoyar en otras actividades, esa actitud de cumplir mi horario y salir corriendo, se terminó.
Si bien existen figuras docentes que cumplen horario en mas de dos centros de trabajo, pareciera que si antes no cumplían en ninguno, ahora será peor. Porque se buscará el pretexto de estar ocupado en uno y no hacer lo de otro, y asi en consecuencia. Son cánceres que se vienen arrastrando de años y hoy han roto en supura y no les pueden hacer mucho, prácticamente nada.
Las relaciones laborales sufrirán sin lugar a dudas cambios coyunturales que debemos tener presentes para hacer lo que nos corresponde de forma armónica, empática y no agresiva y violenta, soberbia. Este periodo vacacional que está a punto de concluir y que ya inician muchas escuelas a enviar materiales para su revisión, considero que debe ser de respeto para todos y con todos.
Si bien el regreso será voluntario y escalonado, esto quiere decir que serán grupos máximo de 20 alumnos de forma presencial, recesos escalonados, gel antibacterial, uso obligatorio del cubrebocas, y en la medida de lo posible la sana distancia entre todos. Sumemos a estas medidas, la disciplina regular, el area de trabajo social, las peleas, los malos entendidos, porque hace dos ciclos escolares, esta area escolar tenia tintes de ministerio público. Será algo interesante. Donde todos debemos dar lo mejor de nosotros, y trabajar a diario para lograr nuestro propósito: el aprendizaje.
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